La alimentación de los niños durante los primeros 6 meses de edad debe basarse exclusivamente en la leche materna. Luego se pueden empezar a introducir alimentos complementarios, sin cortar por completo la lactancia.
Desde este momento, debemos empezar a pensar qué alimentos ofrecerles, cuáles aportan mayor cantidad de nutrientes y cuáles es mejor evitar debido a su bajo nivel nutritivo o por presentar un peligro para el bebé, debido a su textura o técnica de cocción.
Todas las edades tienen distintas pautas alimenticias. Cuanto mayores son los niños, menores restricciones tendrán en sus menús. Muchos alimentos están prohibidos debido al sistema digestivo aún inmaduro de los bebés menores de 1 año, otros por riesgo de asfixia y algunos porque simplemente no son saludables (a toda edad).
Aquí una lista de alimentos prohibidos antes del año de edad:
Frutos secos: por riesgo de asfixia, ya que son pequeños, redondos y duros. Idealmente no ofrecerlos hasta los 5 años. Sí se pueden dar molidos. En este mismo sentido, la uva y manzana también están prohibidas.
Leche de vaca: su exceso de proteínas y minerales podría afectar sus riñones.
Pescados grandes: como el atún, debido a su contenido excesivo de mercurio de ciertos pescados.
Sal: se recomienda evitar agregar sal a los alimentos pues sus riñones e hígado están en proceso de maduración. Alimentos salados tampoco son aconsejables (como sopas en polvo, embutidos y verduras en vinagre).
Miel: contiene bacterias que su intestino no puede eliminar, por lo que existe un alto riesgo de contraer botulismo, una enfermedad muy peligrosa que provoca que los músculos del bebé se paralicen. Otro alimento que también puede producir botulismo son los tés de hierbas, ya que muchos son neuro-tóxicos.
Ciertas verduras de hoja: como la acelga y espinaca, contienen muchos nitratos porque crecen a ras de suelo. Además, todas las verduras no se pueden dar crudas.
Azúcar: en todas sus formas. El azúcar es un alimento muy procesado (igual que la sal) el cual puede producir obesidad infantil, caries y diabetes. No aporta nada nutricionalmente y es adictivo. Los alimentos procesados dulces suelen tener mucha azúcar, y es mejor evitarlos especialmente antes del año. Lo mismo con los zumos de frutas: al hacerlo jugo, la fruta pierde las vitaminas pero no el azúcar.
La carne, pollo, pescado y huevo deben estar bien cocinados, pues pueden contener bacterias que solo se eliminan con una buena cocción.
Accede a nuestra Comunidad de Padres y encuentra más artículos sobre crianza, consejos y experiencias de otros padres.
3 minutos