Como opción de esterilización, el porcentaje de hombres que se realiza una vasectomía es muy bajo en comparación con la ligadura de las trompas de Falopio en las mujeres. Esta diferencia de género tiene que ver con que, históricamente, el tema de la concepción y planificación familiar era casi exclusivamente de las mujeres.
Hoy en día, la vasectomía se posiciona como una opción muy segura y conveniente. Es por esto que, cuando una pareja se decide por dejar de tener hijos, se enfrenta a la duda de cuál de los dos se someterá a la esterilización.
Esterilización femenina
Cualquier mujer adulta previamente informada puede ser candidata a la esterilización. Algunos centros de salud recomiendan realizar esta operación cuando hay maternidad cumplida, los métodos anticonceptivos hormonales están contraindicados o por un problema de salud.
Ligadura de trompas
La ligadura tubaria o de trompas es un método de esterilización quirúrgica femenina permanente que utiliza como técnica la oclusión: se realiza un ligamiento en la región media de las trompas de Falopio. La cirugía se realiza a través de una incisión abdominal o por laparoscopía.
Esta última suele ser una operación ambulatoria y poco invasiva, con una rápida recuperación post-operatoria.
Por otro lado, existe la opción de una resección de una porción de las trompas, que no solo permite la esterilización, sino también reduce la probabilidad de cáncer de ovario.
La principal ventaja en comparación a la vasectomía es que la ligadura de las trompas tiene un efecto inmediato: en la vasectomía, el paciente debe esperar cerca de tres meses y luego confirmar la esterilización.
Vasectomía
La vasectomía consiste en una operación en la que se cortan u obstruyen los conductos del escroto que comunican a los testículos con el exterior.
Es un procedimiento rápido que requiere anestesia local, con una recuperación de pocos días. La primera alternativa que se recomienda cuando una pareja acude a evaluar sus opciones de esterilización es la vasectomía, ya que es una operación menos invasiva, ambulatoria y con menores riesgos asociados.
Tres meses desde la operación, se debe realizar un espermiograma para corroborar la efectividad de la esterilización. La vasectomía en algunos casos puede ser revertida a través de otra operación.
Lo más importante es que la pareja se informe sobre sus opciones, factores de riesgo, tasas de falla, complicaciones secundarias, entre otros aspectos importantes, antes de someterse a cualquiera de las opciones de esterilización.
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